Madrid

Llegó Madrid, y nadie sabe las ganas que le tenía a este viaje. Ya hace un año que quería haber ido, para navidades volví a querer ir (tengo pendiente unas navidades con Susana allí), y antes de la cuarentena, también quería haber ido (vamos, menos comprar las entradas tenía ya pensado todo lo que íbamos a ver) así que podéis imaginaros las ganas que tenía de este viaje. Ha sido solo un fin de semana, pero como vais a ver ha sido cortito pero intenso. 

DÍA 1 (Viernes):

El primer día que estuvimos allí, lleguemos ya tarde porque salimos de casa sobre las dos de la tarde (yo estuve trabajando por la mañana) así que lo que es ver monumentos y cosas, no vimos nada; aunque eso no nos impidió no parar. 

Lo primero que hicimos fue ir "Malvys Shakes" un local donde hacen helados, batidos, crepes, gofres... Llevaba muchísimo tiempo queriendo probarlos y he de deciros que no defrauda, de hecho, ahora mismo quiero volver a Madrid para volver allí. Nosotros nos cogimos un helado total black, un helado de fresa con cono de vainilla y un batido de banana avainillada. Solo puedo decir una cosa: IMPRESIONANTE. El trato recibido fue también muy bueno: además de que fueron simpáticas todo el tiempo, a Susana se le cayo la bola del helado (si, en plan película) y nos la volvieron a poner. 

Después de eso fuimos a dar una vuelta por Gran Vía y nos apeteció entrar al pedazo de Primark que tienen allí, luego volvimos al ático donde estábamos alojados y ya entonces fuimos a cenar a un mexicano llamado "El mezclaito" y lo mejor fue sin duda el trato, que también fue muy bueno. La verdad es que por toda esa zona hay bastantes bares y restaurantes que tienen todos muy buena pinta, así que elegir solo uno es difícil (menos mal que no vivo allí porque tendría que probarlos todos)

Después fuimos a un Mcdonalds porque Susana en el mexicano no ceno nada. Luego fuimos hasta la Puerta del Sol y allí vimos un espectáculo callejero. Por último, volvimos al ático y nos echemos a dormir.

DÍA 2 (Sábado):

Empezamos el segundo día  y lo primero que hicimos fue ir a IFEMA a ver una exposición sobre Tutankamon, que realmente fue el motivo principal de ir a Madrid pues quería verla antes de que la quitarán. Después de verla fuimos a comer al ático, y luego estuvimos en el Templo de Debod y en el Retiro. De estas tres cosas os haré posts separados porque tengo muchísimas fotos y creo que se merecen su propio post cada uno. 

Por la noche, estuvimos en la plaza donde esta el teatro y había un señor con un telescopio y vimos Júpiter y Saturno. Fue una pasada. 

DÍA 3 (Domingo):

Último día y lo empezamos visitando el Museo Nacional de Arqueología y aquí tengo sentimientos encontrados, os hablaré largo y tendido en un post sobre esto porque siendo lo que más me gusto de todo lo que vimos fue del sitio donde más disgustada salí. La visita nos duro toda la mañana, así que fuimos a comer y después nos fuimos a Faunia, donde teniamos las entradas ya compradas y la verdad es que tampoco me termino de gustar. Después de ver Faunia, nos volvimos ya a casa: muy cansados pero muy emocionados de todo lo que habíamos visto, y por supuesto, deseando volver a Madrid dentro de poco.

En los siguientes post os hablaré de las cosas que yo creo que se merecen un huequito en este blog, como son: Tutankamon, Templo de Debod, el Retiro, el Museo Nacional de Arqueologia y Faunia. 

Antes de acabar, no se si sabéis que es necesaria una pegatina medioambiental de la DGT para poder ir por Madrid y que en caso de no llevarla, te multan. Nosotros no lo sabíamos y no la llevábamos, así que tuvimos que aparcar en las afueras y usar Cabify. También quería hablaros de Cabify y es que todos que cogimos nos trataron genial, y esta bien de precio (lo mismo que te cuesta un parking más o menos) Si vais con niños, es necesario usar Cabify Kids para que os pongan sillita de coche.